El Gobierno suspendió la suba de las tasas en los aeropuertos

Implicaba un incremento del 139% en los vuelos locales y del 61% en internacionales.
Sorpresa total. Esa fue la reacción de los directivos de aerolíneas al enterarse por LA NACION de que el Gobierno había suspendido la readecuación de las tarifas aeroportuarias, publicada el miércoles pasado en el Boletín Oficial.
El nuevo régimen introducía fuertes aumentos en las tasas de embarque que pagan los pasajeros y sustanciales descuentos en las tasas que paga la mayoría de las empresas aerocomerciales. De allí la reacción de los empresarios.
La suspensión inmediata del cambio tarifario resuelto por el Organismo Regulador del Sistema Nacional de Aeropuertos (Orsna) fue ordenada desde Madrid por el ministro de Planificación, Julio De Vido, y dada a conocer en un comunicado difundido en el mediodía de ayer.
El mismo día, LA NACION había difundido los aumentos del nuevo régimen de tarifas. "Probablemente en el Gobierno no esperaban esta repercusión, pero la suspensión será vista como una desprolijidad difícil de explicar ante las empresas", deslizó una fuente vinculada con las aerolíneas.
Desde la Secretaría de Transporte argumentaron que la suspensión es meramente momentánea y que se debió a que la resolución original no cumplió con todos los pasos administrativos.
También dijeron que desconocían si el Gobierno terminará anulando las subas y, al mismo tiempo, negaron que se estuviera desautorizando al Orsna.
El 22 de enero, el organismo presidido por Horacio Orefice había establecido un aumento del 139,7% en la tasa de uso de aeroestación -más conocida como tasa de embarque- que pagan los pasajeros de vuelos de cabotaje. Esta subió de 6,05 a 14,50 pesos. En el caso de los vuelos internacionales, la tasa pasó de 18 a 29 dólares, un incremento del 61% en la moneda norteamericana.
El nuevo cuadro tarifario fijaba también aumentos del 30% en las tasas que pagan las aerolíneas por el aterrizaje y el estacionamiento de los aviones que realizan vuelos internacionales.
La salvedad era que la suba se aplicaría a las compañías que adeudan pagos, situación en la que se encuentra Aerolíneas Argentinas. También se daba por descontado que esta empresa, conducida ahora por el Estado, saldaría sus deudas y pasaría a beneficiarse con los descuentos.
Para las aerolíneas que no registraran deudas con Aeropuertos Argentina 2000, que controla las principales terminales del país y recauda las tasas, se establecían descuentos del 35% promedio, que podían llegar al 45 por ciento en algunos casos.
Según la resolución del Orsna, el incremento iba a posibilitar que Aeropuertos Argentina 2000 mejorara las tareas de mantenimiento, tras "el deterioro sufrido en las tarifas en la última década".
La resolución no menciona que, a diferencia de la mayoría de las tarifas de servicios públicos, esta tasa se mantuvo dolarizada y fue aumentando en pesos. Si se ratifica la suba resuelta por la Orsna, que estaba dispuesta para marzo, la tasa acumulará un incremento de 463,8% en moneda local desde 1998.
Fuente: www.lanacion.com.ar